Como nunca el agua se ha vuelto preciada en el planeta. Sin duda es el “nuevo oro líquido”, por la necesidad de tenerlo al alcance y por la lucha para que a futuro no llegue a escasear. El agua ha sido también vital para el arte, desde que el hombre descubrió su propia capacidad de expresión artística. Y es que sin el agua, no se habría podido darle continuidad a las manifestaciones de arte a medida que se iba organizando la sociedad.
El agua ha permitido en el arte, por ejemplo, diluir o disolver diferentes pigmentos de distintos orígenes, para poder así aplicar colores en distintas superficies. El poder hacer mezclas desde concentradas a más diluidas, ha también permitido lograr diferentes efectos en las obras de los artistas. Como ejemplo, podemos citar la técnica de la acuarela que depende directamente del agua para poder manipular los colores sobre el papel. Pero bien sea la acuarela o cualquier otra técnica que de pronto puede permitir una aplicación directa del material sobre la superficie a trabajar; en lo que sí coinciden todas las formas de arte, es en la necesidad del agua para poder hacer algo básico: LIMPIAR.
Y es que el arte sin limpieza tampoco podría ser posible, ya que se requiere tanto de pulcritud, como de la precisión, para que una obra no sólo se conserve y llegue a ser lo que el autor desea, también para que resista el paso del tiempo. Como ejemplo, piensen nada más en lo que sucede cuando al querer aplicar un color, quedan rastros de otro tono usado anteriormente o cuando un trabajo llega a mancharse simplemente por haber sido manipulado con manos que no estaban limpias. Otro caso es cuando sencillamente, no le sacamos el mejor provecho a nuestros materiales de arte, por creer que cuando se deja por mucho tiempo pintura en nuestra bandeja de mezclar o paleta, la misma no pierdes sus cualidades más puras de coloración, como la permanencia. En otras palabras, usar un color que se ha dejado reposar en una bandeja por mucho tiempo, no nos va a brindar la mejor calidad para que la obra de arte perdure el tiempo deseado.
Dada la importancia del agua para el arte, en especial en temas de limpieza, a continuación enlistamos algunos consejos para que no olvides lo vital que es el agua para poderle darle rienda suelta a la expresión artística:
-Lavar bien los pinceles es esencial para que no haya mezcla indeseadas de colores. No es nada agradable aplicar un tono y que se arrastren tonos que se usaron anteriormente.
-Sea cual sea el tipo de pintura que utilices, es importante lavar bien los recipientes, bandejas, paletas o similares que se utilicen para trabajar, de manera que no contengan ninguna sustancia, ni restos de otros colores usados, para evitar el mismo efecto de que uno color a aplicar se mezcle con otro no deseado.
-La misma recomendación de lavar recipientes, bandejas, paletas o similares donde se viertan pinturas, se aplica para luego de usarlas. Quitar restos de colores empleados en los recipientes es necesario, sobre todo después de que pase un tiempo tras nuestro último trabajo. Dejar en bandejas colores que no van a ser usados de inmediato, hace que estos vayan perdiendo con el paso del tiempo, sus mejores cualidades.
-Sea cual sea la técnica que uses, ten cerca de tu área de trabajo artístico un lugar donde puedas tomar agua o sencillamente lavarte las manos. Piensa en casos cuando te has manchado, cuando requieras limpiar utensilios, tu mesa o área donde labores; siempre el agua será necesaria y es práctico tenerla cerca.
-Y mas allá que trabajes con pasteles, carboncillo, acuarela, lápices de colores, óleo, acrílico, cualquier técnica posible, tus manos son esenciales para tu labor de arte y darles el mejor cuidado es primordial. El agua es también el mejor aliado para proteger, limpiar y humectar la piel, que es delicada, de nuestras manos.
Que disfruten estos sencillos consejos,
Melissa G.
agua arte, importancia del agua arte, agua arte, consejos limpieza, limpieza arte, limpiar instrumentos arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario